Descubre los aromas de El Jardín de las emociones.

Los médicos andalusíes le atribuían propiedades curativas para el sistema nervioso, es un aroma que se vincula al bienestar y la sensualidad, propiciando la serenidad y la confianza. Al aroma emblemático del ámbar le añadimos un toque afrutado de granado que eleva la sensualidad del acorde y nos traslada a un universo interior, cálido y suave, de luces tamizadas, confortable y seguro.

Es una de las plantas medicinales mas utilizadas en la farmacia botánica, también la que mas identificamos con la relajación y el descanso porque se utiliza habitualmente para inducir al sueño. La contemplación de un campo de lavanda produce serenidad y alegra el espíritu, nuestra composición refuerza el poder evocador de la lavanda con otros toques aromáticos como son el espliego o el incienso además de un original toque cítrico.

Es la reina de las flores en aromaterapia, en torno a ella creamos un bouquet que ayuda a gestionar los estados de cansancio nervioso y estrés. El aroma a rosa conecta también con la parte mas creativa del cerebro y nos ayuda a renovar energía propiciando la admiración por lo bello. Se asocia a imágenes muy inspiradoras: los rosales multicolores, los pétalos, la luz del mediodía o los ramos de rosas.

Una de las flores mas cantadas por los poetas andalusíes, el jazmín tiene un efecto estimulante sobre la mente, su aroma dulce nos sugiere sensaciones de afecto, lo asociamos con imágenes que apelan a la plenitud del momento y la contemplación, un rincón en el jardín, un cenador cubierto por una enredadera de jazmín en una noche estrellada. No en vano, el jazmín es también una de las flores mas usadas en los llamados perfumes orientales-florales.

Los árabes llenaron los estanques de sus jardines con nenúfares para crear una ilusión mágica, es una metáfora del agua, una llamada a dejar volar la imaginación. En nuestra composición el aroma afrutado y de hojas que tiene el nenúfar, se potencia con los toques de hiedra para recrear la sensación del estanque andalusí, una imagen que se asocia a lo creativo, lo poético y también a la ilusión.

En árabe clásico significaba Flor, es un símbolo de la cultura andalusí y de su representación del paraíso en la tierra, un aroma muy relajante que se asocia a la pureza y propicia estados de ánimo vinculados a la alegría y el gozo. Nuestra composición incluye otros cítricos que aumentan esa nota vital y apasionada, relacionada con visiones de verano, vacaciones, paseos y huertos frondosos.

La menta es a la vez un olor y un sabor, esa doble naturaleza incrementa su poder de evocación, es una planta que refresca y revitaliza el cuerpo pero también estimula la mente, incrementa la concentración y propicia la conexión con imágenes de libertad y de vitalidad. Para incrementar ese aspecto refrescante y estimulante nuestra composición añade notas amaderadas y un toque de eucalipto.